«Ver como la autoestima de un niño con cáncer aumenta por el simple hecho de mejorar su aspecto, me hace sentir muy bien». Lo dice Leticia Falagán, psicóloga y, desde hace cinco meses, delegada de Kimo Kap en Salamanca. Confiesa que también ha vivido momentos duros, pero la satisfacción que recibes pensando que ellos se van a sentir mejor, «no tiene precio».
Kimo Kap es una iniciativa solidaria que consiste en la elaboración de gorros-bandanas para los niños que están enfermos de cáncer. Actualmente hay 26 delegaciones repartidas por España, con 36 delegadas que llegan a cubrir 46 hospitales. Leti se unió al proyecto después de trabajar como voluntaria con ASION, la asociación que lleva el ocio en los hospitales de Madrid, junto a Jeanne DeMontluzin de la que solo tienen palabras de agradecimiento y admiración y a la que asegura «todos deberían conocer».